Un sueño de rugby: el día que conocí a Richie McCaw
3 feb6 Min. de lectura
Por: Juan José Marín
Descubre como un fanático de los All Blacks cumplió su sueño de conocer a su ídolo en un viaje épico por Nueva Zelanda y AustraliaHace tres años, decidí pausar mi carrera en el rugby. Una conversación con mi padrastro Diego, quien siempre ha sido como un padre para mí, me ayudó a entender que ya había logrado mis metas deportivas y era hora de perseguir mis sueños personales.
Así, me mudé a Australia con la ilusión de vivir la cultura de la ovalada y, sobre todo, de conocer a mi héroe de infancia: Richie McCaw.Un mes después de llegar a Sídney, vi en redes que Richie estaba en un evento cercano. Aunque corrí al lugar, no logré entrar ni acercarme a él. Regresé a casa desanimado, pensando que sería un sueño frustrado. Pero Valentina, mi pareja y compañera en esta pasión del rugby, me recordó: “Es tu sueño, no puedes rendirte”. Eso me motivó a trazar un nuevo plan: viajar a Nueva Zelanda para intentarlo otra vez.
Viajando por Nueva Zelanda: En busca de mi ídolo del rugby
En mayo de 2024, recorrimos el país en campervan, viviendo de cerca la pasión por el rugby. En Christchurch, asistí a un partido de los Crusaders, donde la energía y tradición del lugar me impactaron especialmente con la entrada de "The Guardians", un espectáculo único donde caballeros templarios montados a caballo entran a la cancha representando las ligas locales de Canterbury y como estas nutren a los Crusaders. Acabó el partido con un resultado no satisfactorio y esperé al meet and greet posterior al partido. Vi varias leyendas del rugby en el estadio, entre ellas a Scott Robertson (actual entrenador de los All Blacks) y a Kieran Read (capitán de los All Blacks en 2019). Cuando Kieran pisó la cancha, generó una avalancha de fanáticos que la seguridad tuvo que contener. Acá me di cuenta de que era más fácil conseguir una cita con el primer ministro de Nueva Zelanda que con Richie, un verdadero símbolo nacional. Continué mi camino por la Isla Sur...
De camino a Queenstown, un desvío inesperado nos llevó a encontrarnos con un aviso gigante de Richie: "La tierra de McCaw, del rugby del campo a capitán de los All Blacks". Así es, había llegado a su pueblo natal sin siquiera tenerlo en mis planes. Visitamos la cancha donde jugó por primera vez y me senté en la banca que simboliza su legado. Estar ahí reavivó mi determinación de conocerlo.
Unos días después, me llegó la notificación de un evento: "El almuerzo de los 4 reyes del rugby". ¡Así es! Richie McCaw volvería a Sydney, esta vez acompañado de John Eales, leyenda del rugby australiano y capitán de los Wallabies campeones del mundo en 1999; Martín Johnson, leyenda del rugby inglés y capitán de Inglaterra campeones del mundo en 2003, y John Schmidt, leyenda del rugby sudafricano y campeón del mundo en 2007. Contacté a los organizadores del evento, pero no era fácil conseguir una entrada, ya que estaba diseñado para altos ejecutivos y directivos del rugby australiano. Brad, el anfitrión del evento, a quien le conté mi historia, me ayudó y reservó dos entradas. Pero bueno no todo era color de rosa...Cuando me dijo el costo de la entrada no me lo podía creer, pero esta vez ya solo era conseguir el dinero. Junto con Valentina hicimos muchas horas extras y pudimos costear las entradas.
Richie McCaw: Más que un héroe, una inspiración
El día del evento fue inolvidable, lo había esperado por 15 años. Compartí mesa con fanáticos apasionados, entre ellos un sudafricano con quien tuve la mejor conversación de rugby de mi vida. Durante la conferencia, cada “rey” compartió valiosas lecciones, pero Richie destacó por su humildad y autocrítica.
De cada rey me llevé una impresión distinta y una anécdota de la conferencia:
John Eales, tal vez la persona más alta que he visto. Me parecía irrisorio decirle que en Colombia jugaba de segunda línea. Cuando le preguntaron como hacía para lidiar un jugador como David Campese dio como respuesta: "el controlar a los jugadores es labor del entrenador pero si este no los podía dominar solo el capitán podía".
Martín Johnson, famoso por su frase "Si un tackle no es fuerte no es un tackle, es un insulto“, le preguntaron si era muy difícil ser el capitán de Johny Wilkinson. Respondió que "sí lo era", pero esa locura y ese pensar out of the box fue el que llevó a Inglaterra al podio. Dijo que al final lo importante es "como aportas al equipo".
Como anécdota, Johnson sabía del rugby en Colombia, en especial del femenino. Estaba impresionado cuando le dije que también había rugby masculino.
John Schmidt, este hombre es la definición de carisma. Su perspectiva de que para ser buen jugador de rugby se debe dejar a un lado el ego y trabajar en colectivo, no importa cuántos tackles hagas por minuto, cuántos trys anotes o cuantos metros hagas si no piensas en colectivo.
Richie McCaw, la eminencia del rugby, un hombre autocrítico y sin pelos en la lengua, a quien le escuché palabras fuertes como " Scott Robertson es un gran entrenador para Crusaders, pero no para los All Blacks" denotando que el regionalismo existente entre la Isla Sur y Norte eran un freno para la disciplina. Hablar así de alguien que fue tu entrenador y que te formo, me parecieron cosas de grandes.
La leyenda
Al final de la conferencia llegó el momento de conocer a Richie. Los demás "reyes" ya sabían que era colombiano y, al verme, exclamaron emocionados: “¡Colombia!”. Cuando tuve a Richie frente a mí, lo miré a los ojos y le dije: “Eres mi héroe. Gracias por ser mi ejemplo a seguir y por mostrarme que hay vida después del retiro”. Él sonrió y me respondió: “Gracias, no me lo esperaba”.
Nos tomamos varias fotos, y firmó varias de mis camisetas. Justo cuando el organizador del evento anunció que ya no habría más firmas, le pedí que firmara solo una más: la de mi club, Minotauros. Sin dudarlo, Richie ignoró el aviso y dijo: “Un minuto más, no nos demoramos”. Tomó la camiseta, pronunció el nombre del club a la perfección y comentó: “Yo sé lo que significa pertenecer a un club”.
Antes de despedirnos, nos dimos un abrazo y me dijo: “Gracias”. En ese momento confirmé su humildad y calidad humana. A pesar de la presión de los organizadores, hizo lo posible para que disfrutara al máximo mi encuentro con él.
Me fui más que feliz, agradecido con la vida por haber cumplido mi sueño y, sobre todo, por tener a Valentina a mi lado. Su apoyo fue inquebrantable y fue fundamental para lograrlo.
Como añadidura con todo este proceso y con gran fanatismo, he podido conocer grandes personalidades del rugby como:
1. Joe Moody ( Crusaders y ex All Black campeón del mundo )
2. Owen Franks ( crusader y ex All Black campeón del mundo)
3. Kieran Read (ex capitán de los All Blacks)
4. Michael Hooper ( ex capitán de los Wallabies)
5. Seevu Reece ( wing de los All Blacks)
6. Gio Bower ( Pilar de los All Blacks)
7. Christian Lío Williams ( crusader)
8. Tanya Kalounivale ( Pilar de las Black Ferns)
9. Rob Penny (entrenador de Crusaders)
10. Jared Waerea Hargreaves ( Sydney Roosters )
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Que linda historia. Tremenda leyenda.